A veces, en medio del ajetreo diario, se nos olvida mirar con detenimiento lo que realmente le da sentido a nuestra vida. La tierra que pisamos, los bosques que nos dan sombra, el aire limpio que respiramos, el agua que brota de los manantiales y los saberes que las comunidades han conservado por generaciones. Todo eso forma parte de lo que somos, por lo que considero que cuidarlo no es un lujo, es una responsabilidad.
Recientemente se aprobo´ una reforma que impulsamos en el Congreso mexiquense con el objetivo de que se reconozca y proteja el patrimonio natural y biocultual de nuestra entidad. ¿Co´mo poder seguir aspirando a construir un futuro sin ocuparnos de proteger lo ma´s valioso que tenemos? Por supuesto, me refiero a nuestros recursos naturales.
¿Que´ tan seguido te has preguntado u´ltimamente: “que´ pasa con el clima hoy”? Lo cierto es que vivimos un momento donde el cambio clima´tico se ha vuelto parte de nuestra realidad cotidiana —cuando sentimos el calor ma´s intenso, la lluvia ma´s escasa, los ri´os ma´s secos—, ¿no seri´a congruente cuestionarnos el porque´ de estos cambios tan bruscos?
Es entonces que la reforma que presentamos como bancada verde cobra au´n ma´s sentido. Fue impulsada con el objetivo de reconocer lo que tenemos que cuidar, que es nuestra biodiversidad, asi´ como buscar la manera de que no se sigan explicando nuestros recursos naturales como si fueran infinitos.
Gracias a su aprobacio´n, ahora se podra´ proteger, restaurar y promover su uso sostenible. Lo importante sera´ tambie´n que las autoridades se aseguren que esta´ siendo asi´, por lo que se podra´ sancionar a quienes destruyan esas a´reas protegidas.
Como siempre lo digo, la participacio´n activa de los gobiernos locales es importantísima para hacer un cambio que verdaderamente permee´ a nivel estatal y esta no es la excepcio´n, pues la reforma llama a los gobiernos municipales a identificar y valorar su propio patrimonio. Posteriormente, se creara´ un cata´logo estatal que documente toda esta riqueza para que pueda ser protegida, compartida y transmitida a las nuevas generaciones.
Y aunque esta reforma se concreto´ desde el a´mbito legislativo, su verdadera fuerza proviene de las comunidades, de los pueblos originarios y de quienes, di´a a di´a, siguen cuidando la tierra como lo han hecho desde siempre. Ellas y ellos han sido los guardianes del patrimonio natural y biocultural, muchas veces sin reconocimiento alguno. Hoy, por fin, el Estado de Me´xico les da un lugar en la ley y, con ello, da un paso adelante en la defensa del medio ambiente.
Estoy convencido de que legislar nos da a su vez la oportunidad de sembrar respeto, conciencia y compromiso. Porque lo que cuidamos hoy no deberi´a ser un lujo, sino una responsabilidad, puesto que definira´ lo que dejemos man~ana.
Porque cuidar lo que somos, es tambie´n proteger lo que seremos.
@pepecouttolenc